Esta noche, con fecha 6 de noviembre de 2012 (apenas 1 año y 21 días) que nos dejó nuestro padre “Manuel Monzón Mingorance” cariñosamente conocido por (MANOLO elde LOS RUMBEROS), se hace realidad la promesa que el Sr. Bermúdez nos hizo… (el Excmo. Sr. Alcalde fue tres veces a visitarnos al Tanatorio), por lo que creemos que la primera visita fue obligada, como máximo representante de nuestra Ciudad, y las otras dos… fue por amistad, ya que conocía y admiraba a nuestro padre.
El nombrarle hoy “Hijo predilecto de la ciudad de Santa Cruz de Tenerife”, es un orgullo que “nosotros” su familia, llevaremos siempre, al igual que el título de Hijo Ilustre que el Cabildo de Tenerife le otorgó en la primavera del pasado año, aún vivo nuestro padre.
Nosotros les damos las gracias por haberse acordado de alguien que con su alegría y dedicación cambió el rumbo de la fiesta más popular y mundialmente conocida de Santa Cruz de Tenerife, que no es otra que nuestro Carnaval.
Él fundó la comparsa con amigos del Mercado Nuestra Señora de África, allá por 1965. Meses después se le ocurrió la idea de unir a esta parranda un cuerpo de baile (todos vestidos con disfraz tropical)… y así nació el nombre de COMPARSA a finales de 1966.
Fueron años de éxitos. Por toda la isla se requería la presencia de Manolo Monzón y su grupo.
Sin Rumberos, nosotros no hubiéramos podido conocer a tantos amigos, personalidad, realizar viajes a la península ni al extranjero en años en los que muy pocas personas se podían permitir ese lujo. Y menos aún estar hoy aquí recogiendo este nombramiento en un salón en el que nunca habíamos estado. Todo eso gracias a él.
Manuel Monzón llevó el bombre del Carnaval de Santa Cruz y la bandera de Tenerife por gran parte del territorio nacional, y por las calles de París, Viareggio y La Habana.
No solo lo decimos nosotros (su familia), también los que le conocieron decían de él que era un hombre con temperamento y al mismo tiempo respetaba y se hacía respetar, tanto por sus amigos, como por sus enemigos.
Nuestro padre será siempre el COMPARSERO NÚMERO 1 del Carnaval de Santa Cruz, de la Isla de Tenerife, de Canarias, del territorio Nacional y de Europa.
Y para despedirme, quisiera leer unas pequeñas líneas que aparecían en el prólogo del cancionero de nuestra comparsa del año 1973, escrito por un señor que lo firmó como “S. Porcel”.
Decía lo siguiente:
“De pronto, el gentío se agolpa en las aceras. ¿Qué ocurre? Algo interesante viene por allá arriba. Sí, ya lo anuncian las banderas. Es un numeroso grupo que avanza rítimicamente, al son de diversidad de instrumentos. Chichos y chicas, con trajes multicolores, formando un conjunto vivo y pintoresco, se desplazan a lo ancho de la avenida, en danza singular, ofreciendo un espectáculo maravilloso.
¡Son “Los Rumberos”!
¡Vamos arpisa, que pasan “Los Rumberos”!
Sí, la conocida Comparsa “Los Rumberos”.
Ha llegado a ser uno de los conjuntos que más atracción y más lustre vienen dando a las Fiestas de Invierno de Tenerife. Compuesta por varias decenas de entusiastas jóvenes de ambos sexos y dirigida magistralmente por el no menos entusiasta Manuel Monzón, –fundador, animador y alma del conjunto– nos cautiva y nos sorprende cada año al presentarnos, superado, el cuadro fantástico de sus estupendas actuaciones…
Esto es (nada más y nada menos) lo que logró nuestro padre… pues como emigrante que fue, llevó una ilusión a Venezuela y trajo aquellos ritmos en su retorno, lo inyectó en nuestro perfil chicharrero y con el tiempo lo exportamos ahora como algo nuestro al resto del mundo.
Queremos expresar nuevamente nuestro agradecimiento al Excelentísimo Sr. Alcalde, miembros de la Corporación Municipal, excelentísimas e ilustrísimas personalidades, señoras y señores y a todo el público en general (tanto carnavalero como no), que esta noche han querido acompañarnos en este nombramiento de hijo predilecto de la ciudad a título póstumo, a MANUEL MONZÓN MINGORANCE que siempre estará presente cuando se cante en cualquier lugar:
Yo no tumbo cañas, que las tumbe el viento, que las tumben los rumberos… con su movimiento…
¡GRACIAS!