Carolina Hernández, que junto a Víctor Díaz forma Caví Lladó, firma de la fantasía, aseguró ayer que solo Leo, técnico de sonido, Víctor y ella sacaron a Saida de la cárcel en que se convirtió su disfraz. “Nos abrazamos, y no me arrepiento. Lo volvería a hacer. Ella solo gritaba: Pa, ma, me estoy quemando. Víctor y yo la sacamos y la llevamos hasta la ambulancia”.