Aunque no establecido por la organización del evento, en 1990 se crea un nuevo premio para las murgas infantiles, denominado “La Sonrisa de un Niño”, instituido por la murga “Afilarmónica Los Triqui-Traques”, –que en aquella primera edición le fue concedido a la murga infantil Los Bambas-, y en 1995 el premio “Enrique González Bethencourt”, la versión infantil del “Premio Criticón” que desde entonces conceden los periodistas responsables de la información del Carnaval, de los diversos medios de comunicación, para premiar la mejor canción de las presentadas a concurso, siendo su primera destinataria la murga infantil “Los Mamelones”, por la letra “Nuestros padres necesitan un repaso”, original de Manolo Peña Guerrero.
En 1996, y por tres años consecutivos, se adjudicó un premio denominado “Mejor Puesta en Escena”, -concedido en su primera edición a la murga infantil Los Chinchositos-. De igual modo, y de forma paralela, se otorgó en los años 1996, 1997 y 1998 un premio “A la Simpatía”, siendo “Los Pita Pitos” la primera murga infantil en recibirlo. Pese a que en 1999 dejaron de concederse, en el Carnaval de 2009 ambos premios se fusionaron en un nuevo galardón, denominado “Premio a la Interpretación Escénica y Simpatía”, de vida efímera, pues solo se concedió aquel año, que fue a parar a las vitrinas de la murga infantil Los Rebeldes.
En aquel Carnaval de 2009 también fue la última vez que se concedió el “Premio del Público”, que se concedió a la murga infantil Los Distraídos en el año 2005, y en los Carnavales de 2002 y 2003 apareció en las bases del concurso un nuevo galardón, denominado “Premio Absoluto”, con el deseo de condecorar a la murga que estuviera integrada por un 80 por ciento o más de componentes de 12 o menos años de edad. Puesto que en ambas ediciones fue declarado desierto, este galardón quedó suspendido hasta el Carnaval de 2010, resurgido con el nombre “Premio Jesús Tosco”, perpetuando la memoria del “Compinche”, uno de los grandes valedores de las murgas infantiles, que nos dejó a muy temprana edad –siendo extraordinariamente apreciado por todo el gremio murguero–, siendo la murga infantil Los Paralepípedos la primera agrupación en obtenerlo. También en el año 2010 surge un nuevo galardón, denominado “Premio a la Creatividad”, que se adjudicó, en su primera edición, a la murga infantil “Los Mamelones”.
Sin embargo, a pesar de la diversidad de premios que se han creado en el certamen de murgas infantiles, desde que se institucionalizara en el año 1978 el premio de presentación al mejor disfraz siempre ha sido el cum laude del concurso el acaparar el dificilísimo e histórico “doblete” de primeros premios, o sea, el máximo galardón tanto en interpretación como en presentación, cenit que han alcanzado tan solo tres murgas infantiles: Los Lengüines -en 1978–, Los Rebeldes -en 1981 y en 2007 -, y Los Mamelones, en la última edición del certamen infantil.